El Acoso Sexual en el Deporte

Gran escándalo ha surgido en nuestro deporte estos últimos días. La entrenadora Maribel Domínguez y todo su cuerpo técnico fueron separados definitivamente de sus cargos de la selección nacional femenil Sub-20, a dos semanas de que inicie el Mundial de esta categoría.

Información publicada por medios deportivos, ante el hermetismo de la Federación Mexicana de Fútbol, indican que Domínguez y su equipo de trabajo están bajo una investigación para determinar su responsabilidad ante una denuncia anónima que una de las jugadoras envió a través de una carta a la Federación en la que denunció acoso sexual.

Asimismo, la FMF recibió la petición de que actuara o de lo contrario la familia de la jugadora haría público el caso.

Otras integrantes de la Sub-20 también denunciaron ante la FMF que fueron abusadas, pues les pidieron sostener relaciones sexuales a cambio de su permanencia en el equipo.

Es claro que no somos el único país que sufre este tipo de problemas, pero lo que sí es evidente es que, como en la mayoría de los temas, tenemos un atraso bestial en cómo prevenir y responder ante este tipo de situaciones.

Estudios realizados en diferentes países europeos muestran que entre el 20% y el 45% de deportistas encuestados han sufrido acoso sexual. El mismo estudio concluye que de estos porcentajes entre un 6% y un 8% de los deportistas llegan a sufrir abusos sexuales severos.

En el análisis se observa que los comportamientos más leves acaban siendo normalizados y tolerados entre deportistas: contactos físicos como palmadas en el culo o en el hombro; comentarios sexistas; o comentarios sobre la vida personal o sexual. Gran parte de los deportistas entrevistados, más de 200, admiten haber sufrido estos comportamientos, y reconocen que son poco percibidos, visualizados y denunciados.

Generalmente estos abusos se producen entre hombres hacia mujeres, diferente de este caso sui géneris en que el abuso viene de una mujer a otra.

En Europa, la lucha contra el acoso ya ha comenzado. El proyecto Sport Respects Your Rights trabaja en seis países europeos movilizando cientos de deportistas para recibir formación sobre estas agresiones. La formación en clubes y entidades deportivas es la base para reflexionar y luchar contra los abusos sexuales.

La concienciación sobre este tipo de abusos es esencial, así como hacer partícipe a toda la población de su existencia: desde el propio ámbito deportivo hasta la sociedad en su conjunto. Si alguien no actúa adecuadamente, se le debe poder explicar a la familia cuáles son las alternativas que se tienen, situación que en México no se da.

Es por este motivo, imprescindible crear y aplicar una normativa que obligue a promover estas prácticas de prevención del acoso sexual para todos los clubes y federaciones y disminuir así las agresiones.

El Comité Olímpico Internacional (COI) publicó el informe “La protección de los atletas ante el acoso y el abuso en el deporte”, en el que se recogen testimonios que demuestran que, en todos los países y en todos los deportes, se producen casos de abuso y acoso.

En este documento se identifican cinco tipologías de acoso: el abuso psicológico, el abuso sexual, el acoso sexual, el abandono y el abuso físico.

El objetivo del informe es convertirse en un manual de buenas prácticas con diferentes pautas de acción para prevenir situaciones de acoso y abuso en el deporte. Unos cambios que afectan tanto a la organización, como a las instituciones y el personal, y que pasan por fomentar una cultura del respeto que considere a todas las personas en igualdad.

Es imperativo copiar el modelo que ofrecen países avanzados y progresistas, que proponen la creación de un “responsable de bienestar”, una figura que ya existe en países como Inglaterra y cuyas funciones serían “encargarse de coordinar las acciones y políticas del club, entidad o Federación en términos de acoso sexual”, con la finalidad de poder explicar los canales y protocolos para denunciar o, en el mejor de los casos, para estar alerta.

En una entrevista que me fue realizada por el diario Reforma sobre este tema, a quienes les reconozco el desarrollo de un verdadero periodismo crítico y valiente por ir en contra del statu quo, explique el porqué se considera acoso sexual lo sucedido a las futbolistas, que a continuación reproduzco:

“Me das un beso» tiene una implicación sexual ‘si te invita a su habitación hay una expectativa de intimidad’ y ‘el acoso sexual es agravado cuando existe una situación de superioridad», explica Luis Jiménez, especialista en materia deportiva sobre las presuntas acusaciones de acoso sexual de jugadoras y ex jugadoras contra Maribel Domínguez que estuvieron bajo su mandato entre 2017 y 2022.

«Hay un abuso en la posición en la que se encuentra la entrenadora hacia la deportista», advierte Jiménez y que se establece en el Código Penal Federal, en el Artículo 259 Bis.

«Se considera acoso sexual cuando una muestra de afecto no se espera, o no se aprueba, por la otra persona».

Las acusaciones presentadas a CANCHA hacia Parma Aragón, coordinadora del Área de Crecimiento Personal de Selecciones Nacionales, que la señalaron como una de las principales personas que desestima, desoye y detiene las denuncias internas serían calificadas como omisión.

«Estás encubriendo un delito y habría una responsabilidad con el ‘No mira, el escándalo no es bueno para ti, tienes un futuro por delante’.

«Con el simple testimonio de la agraviada es suficiente y la carga de la prueba es para la otra parte. Tendría futuro hacer esta denuncia y si jerárquicamente esta persona está por encima de Maribel».

«Si hay el conocimiento de un delito no tendría porque haber un procedimiento interno que siguiera la Federación sin informarle a la autoridad porque estarían encubriendo al delincuente».